Pastor Axa Macedo.
3 Cuando se acabó el vino, la mamá de Jesús le dijo: -Ya no tienen vino.
4 Jesús le dijo: -Mamá, no deberías decirme lo que tengo que hacer. No ha llegado el momento para que yo comience mi misión.
5 La mamá de Jesús les dijo a los que estaban sirviendo: -Hagan todo lo que él les diga.
6 En ese lugar había seis vasijas de piedra y cada una podía contener entre ochenta y ciento veinte litros de agua. Los judíos las usaban para lavarse en sus ceremonias.
7 Jesús les dijo a los que servían: -Llenen las vasijas con agua. Entonces las llenaron hasta el borde.
8 Luego Jesús les dijo: -Ahora saquen un poco de agua y llévenla al encargado del banquete. Entonces llevaron el agua al encargado.
9 Este probó el agua que se había convertido en vino. Él no sabía de dónde lo habían sacado, pero los siervos sí. Después, el encargado del banquete llamó al novio y
10 le dijo: -Todo el mundo sirve el mejor vino primero. Cuando los invitados se emborrachan, sirven el más barato. Pero tú has guardado el mejor vino hasta ahora.
11 Este fue el primero de los milagros que Jesús hizo. Sucedió en Caná de Galilea. Así mostró su grandeza y sus seguidores creyeron en él. Juan 2:3-11.
1.- Hacer lo que Jesús diga.
Si me amas guarda mis mandamientos (Juan 14:15).
Cuando nuestro Señor Jesucristo da una instrucción es para hacer lo que Él ha dicho, y de esta manera podamos vivir la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.
2.- Ya esta ahí lo que necesitas.
Los sirvientes tomaron lo que ya había en la casa. Las seis tinajas ya estaban ahí. Podrían parecer tinajas sin uso, quizá hasta abandonadas. El Señor no va a utilizar en tu vida lo que no tienes, el va a usar lo que ya esta en tu vida.
Moisés tenía una vara. (Éxodo 14:16)
David tenía una honda y un cayado. (1 Samuel 17:40)
Pedro tenía su barca y sus redes. (Lucas 5:3-4)
3.- Llenen las vasijas.
Normalmente las tinajas debían estar llenas de agua, sobre todo en una celebración. Pero estas tinajas estaban sin agua, probablemente sin uso. Cuando Jesús da la instrucción de llenarlas, estas tinajas volvieron a ser útiles, funcionales. Ellos las llenaron hasta el borde, eso es fe.
Cuando Dios quiere que utilices lo que tienes, es porque el ya esta pensando en lo que hará con ello.
4.- Lleven el agua.
Si eran tinajas de agua, había que llenarlas de agua. Fueron llenadas hasta el borde. Para esto se requirió un esfuerzo. El Señor dijo llénenlas, pero ellos se esforzaron y las llenaron hasta el borde. El fruto de su esfuerzo fue ver agua hasta el borde, no veían vino.
Seguía siendo agua cuando la sacaron de la vasija, hasta que la probó el encargado, entonces se convirtió en vino.
5.- Jesús rompe con las tradiciones.
El buen vino se sirve primero. La mayoría de las personas esperan que lo que le funcione a una persona le tiene que funcionar exactamente a todos. En realidad esto implica mas que solo creer, es necesario actuar; y responder a los sucesos conforme se van presentando.
Las tradiciones no son efectivas para vivirlas cotidianamente. Es el carácter y la actitud nuestra lo que provoca que salgamos victorioso ante cualquier situación.
6.- El buen vino al final.
Solo para los que siguen teniendo sed de Dios.
Es hasta el final que se sirve lo mejor, es hasta el final que llega la respuesta, es hasta el final que recibimos el milagro. La paciencia hace manifiestos sus frutos para que veamos la respuesta de Dios. (Santiago 1:4)
7.- Cada uno tome del vino según sea su deseo.
A cada uno se sirva según lo desee (Ester 1:8)
El buen vino, es símbolo de la llenura del Espíritu Santo. Si podemos tener una búsqueda de la presencia de Dios, aprenderemos a esperar en Él y a obedecer sus mandamientos, esforzándonos en hacer lo mejor para Dios.
La respuesta esta en su presencia.
“En la presencia de Dios es el único lugar donde morirán tus debilidades”.
3 Cuando se acabó el vino, la mamá de Jesús le dijo: -Ya no tienen vino.
4 Jesús le dijo: -Mamá, no deberías decirme lo que tengo que hacer. No ha llegado el momento para que yo comience mi misión.
5 La mamá de Jesús les dijo a los que estaban sirviendo: -Hagan todo lo que él les diga.
6 En ese lugar había seis vasijas de piedra y cada una podía contener entre ochenta y ciento veinte litros de agua. Los judíos las usaban para lavarse en sus ceremonias.
7 Jesús les dijo a los que servían: -Llenen las vasijas con agua. Entonces las llenaron hasta el borde.
8 Luego Jesús les dijo: -Ahora saquen un poco de agua y llévenla al encargado del banquete. Entonces llevaron el agua al encargado.
9 Este probó el agua que se había convertido en vino. Él no sabía de dónde lo habían sacado, pero los siervos sí. Después, el encargado del banquete llamó al novio y
10 le dijo: -Todo el mundo sirve el mejor vino primero. Cuando los invitados se emborrachan, sirven el más barato. Pero tú has guardado el mejor vino hasta ahora.
11 Este fue el primero de los milagros que Jesús hizo. Sucedió en Caná de Galilea. Así mostró su grandeza y sus seguidores creyeron en él. Juan 2:3-11.
1.- Hacer lo que Jesús diga.
Si me amas guarda mis mandamientos (Juan 14:15).
Cuando nuestro Señor Jesucristo da una instrucción es para hacer lo que Él ha dicho, y de esta manera podamos vivir la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.
2.- Ya esta ahí lo que necesitas.
Los sirvientes tomaron lo que ya había en la casa. Las seis tinajas ya estaban ahí. Podrían parecer tinajas sin uso, quizá hasta abandonadas. El Señor no va a utilizar en tu vida lo que no tienes, el va a usar lo que ya esta en tu vida.
Moisés tenía una vara. (Éxodo 14:16)
David tenía una honda y un cayado. (1 Samuel 17:40)
Pedro tenía su barca y sus redes. (Lucas 5:3-4)
3.- Llenen las vasijas.
Normalmente las tinajas debían estar llenas de agua, sobre todo en una celebración. Pero estas tinajas estaban sin agua, probablemente sin uso. Cuando Jesús da la instrucción de llenarlas, estas tinajas volvieron a ser útiles, funcionales. Ellos las llenaron hasta el borde, eso es fe.
Cuando Dios quiere que utilices lo que tienes, es porque el ya esta pensando en lo que hará con ello.
4.- Lleven el agua.
Si eran tinajas de agua, había que llenarlas de agua. Fueron llenadas hasta el borde. Para esto se requirió un esfuerzo. El Señor dijo llénenlas, pero ellos se esforzaron y las llenaron hasta el borde. El fruto de su esfuerzo fue ver agua hasta el borde, no veían vino.
Seguía siendo agua cuando la sacaron de la vasija, hasta que la probó el encargado, entonces se convirtió en vino.
5.- Jesús rompe con las tradiciones.
El buen vino se sirve primero. La mayoría de las personas esperan que lo que le funcione a una persona le tiene que funcionar exactamente a todos. En realidad esto implica mas que solo creer, es necesario actuar; y responder a los sucesos conforme se van presentando.
Las tradiciones no son efectivas para vivirlas cotidianamente. Es el carácter y la actitud nuestra lo que provoca que salgamos victorioso ante cualquier situación.
6.- El buen vino al final.
Solo para los que siguen teniendo sed de Dios.
Es hasta el final que se sirve lo mejor, es hasta el final que llega la respuesta, es hasta el final que recibimos el milagro. La paciencia hace manifiestos sus frutos para que veamos la respuesta de Dios. (Santiago 1:4)
7.- Cada uno tome del vino según sea su deseo.
A cada uno se sirva según lo desee (Ester 1:8)
El buen vino, es símbolo de la llenura del Espíritu Santo. Si podemos tener una búsqueda de la presencia de Dios, aprenderemos a esperar en Él y a obedecer sus mandamientos, esforzándonos en hacer lo mejor para Dios.
La respuesta esta en su presencia.
“En la presencia de Dios es el único lugar donde morirán tus debilidades”.